domingo, 7 de diciembre de 2008

CAIREL DE GRUTA FUENSANTA


Monasterio que navegas presto
cual bajel que rema a la deriva
con brazos de gigante esbelto
incrustado en tu fiel colina.

Que misterio encierra tus paredes
regocijándose en viejas letanías
que en campos de trabajo y talleres
de rezos, una voz de fraile encendía.

Cairel de gruta Fuensanta
de abrupta maleza sombría
caja que encierra campanadas
de plegarias, que quedaron perdidas.

Pareces clavarte en el cielo
asomado a una abadía
desde tu lánguido silencio
ansias de gigante suspiras.

Desapareció el olor de las velas
de los altares, que restos cobijas
y el chirría de todas tus puertas
tan solo te quedan, pájaros que anidan.

Aun te quedan fuerzas, débil guerrero
para surgir de entre las cenizas
para vencer a los usureros
que te desvalijaron y te hicieron trizas.

A veces se duerme tu campanario
con la esperanza en la lejanía
pues ya le pesa este calvario
y el sufrir eterno, del paso de los días.

Solo el agua de tus Caños Santos
te alivian tus dolorosas heridas
y la Virgen con su invisible manto
tus envejecidas piedras cobija.
- A Caño Santo por su misterio y ensueño

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